Trabajadores de 15 países condenaron el anuncio del presidente Nicolás Maduro de expandir la Milicia Nacional Bolivariana y armarla con fusiles, y expresaron su temor de que esa decisión pueda generar “una sangrienta guerra interna”, según un comunicado difundido este martes en Bogotá.
La ADS condenó “la orden de militarizar a la sociedad civil venezolana impartida” por Maduro, quien anunció este lunes que aprobó un plan para expandir a 500.000 los miembros de la Milicia Bolivariana.
“He aprobado (…) los planes para expandir la Milicia Nacional Bolivariana durante este año a 500.000 milicianos y milicianas con todos sus equipos, y garantizar a través de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) un fusil para cada miliciano”, afirmó Maduro sobre ese cuerpo integrado por civiles.
Al respecto, la ADS expresó “el temor de que esa decisión pueda generar una sangrienta guerra interna” en ese país.
La asociación, que dice aglutinar a 25 millones de trabajadores de Brasil, México, Chile, Ecuador, Perú, Venezuela, Colombia, Panamá, El Salvador, Honduras, Puerto Rico, Aruba, Curazao, Nicaragua y Cuba, reclamó de los Gobiernos del mundo, las ONG y la sociedad civil “una acción decidida para presionar la solución pacífica y democrática de la crisis política, social, económica y humanitaria que sufre la hermana República Bolivariana de Venezuela”.
“Es deber del continente americano y de las organizaciones del mundo es presionar al presidente Maduro para que garantice el derecho constitucional de la protesta pacífica y evitar que sean reprimidas por la fuerza pública y por los grupos armados civiles que no es otra cosa que el nacimiento del peligroso fenómeno del paramilitarismo”, añadió el comunicado.
La declaración cita como firmantes a Nilton Souza Silva, de Forca Sindical (Brasil); Salvador Medina Torres, de la Confederación de Trabajadores de México (CTM); Salim Kalkach Navarro, de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) de México; Humprhrey D. Monguen, de la CGTC de Curazao; y Julio Roberto Gómez Esguerra y Miryam Luz Triana Alvis, de la Confederación General de Trabajadores (CGT) de Colombia.