Miles de venezolanos se inscribieron este domingo en la red de voluntarios que espera distribuir en el país alimentos y medicinas donados por otros Gobiernos, mientras otros tantos estamparon sus firmas en actos de apoyo al presidente Nicolás Maduro, cuya legitimidad no es reconocida por decenas de naciones.
El jefe del Parlamento, Juan Guaidó -que el 23 de enero se proclamó presidente encargado del país y cuenta con el respaldo de casi medio centenar de países-, anunció la activación de una página www.voluntariosxvenezuela.com para agilizar el registro de quienes quieren participar en la distribución de la ayuda humanitaria.
Esta plataforma se suma a las asambleas, que tímidamente comenzaron ayer en varios estados del país, con el objetivo de acelerar el censo de voluntarios que trabajarán gratuitamente en la entrega de las donaciones que siguen acumulándose en la frontera con Colombia.
Además de la ciudad colombiana de Cúcuta, se espera que la ayuda humanitaria comience a concentrarse en otros dos centros de acopio, uno en Brasil y otro en una isla del Caribe todavía no determinada.
En este sentido, Guaidó anunció que estos productos comenzarán a entrar al territorio del país en los «próximos días» y pese a la negativa de los altos mandos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y Maduro, que considera esto un show político en su contra.
«La ayuda está en especie en los centros de acopio y esperamos que en los próximos días tengamos el primer avance de ingreso de la ayuda humanitaria», dijo Guaidó a periodistas tras acudir a una misa dominical en Caracas.
El líder de la Cámara aseguró entender que Maduro «se niegue a reconocer la crisis que ellos generaron».
Frente a ello, subrayó que los venezolanos deben trabajar «muy duro (…) para que cese la usurpación» que considera que Maduro está haciendo de la Presidencia «y en paralelo atender la emergencia».
De nuevo, envió un mensaje a los militares y mostró sus dudas de que «nadie hoy se quiera inmolar por acceder al llamado de una persona (Maduro) que perdió el norte y que no tiene respaldo internacional».
«Depende de ustedes no seguir haciendo el ridículo como lo ordena (el palacio presidencial de) Miraflores. Sino hacer valer el orgullo de un uniforme. Depende de ustedes que (el uniforme) recupere lustro, el honor y la simpatía de millones de venezolanos», sostuvo.
Ante eso, finalmente hizo hincapié en que está «muy claro» que «la civilidad (…) va a respaldar sin duda alguna el ingreso de la ayuda humanitaria».
Con información de EFE