El secretario general de la ONU advirtió este martes que su organización no tolerará que los crímenes en Siria queden “impunes ya que su población no lo merece”, y expresó su “enfado y vergüenza” ante la prolongación del conflicto en Siria.
En la inauguración de la III Conferencia de Donantes de Siria en la capital kuwaití, Ban Ki-Moon no sólo mostró “su enorme enojo y frustración con la comunidad internacional por su incapacidad para poner fin a la guerra”, sino que advirtió que la seguridad en la región se tambalea.
La población siria “no pide simpatía, está pidiendo apoyo”, explicó el secretario general de la ONU, para quien las visitas a los campamentos de refugiados son las que le producen vergüenza cuando los niños le preguntan “¿qué hemos hecho?, ¿porqué estamos aquí? o ¿cuándo volvemos a casa?”.
Vía EFE